Milán es la capital económica e industrial de Italia y una de las regiones más desarrolladas de todo el país. Por lo tanto, no es de extrañar que esté lleno de rascacielos modernos y edificaciones que mezclan el cristal con el metal.
A pesar de ser una ciudad tan moderna, Milán es una de las ciudades con mayor cantidad de patrimonio artístico tanto en Italia como en Europa. De hecho, es conocida como la capital del primer románico, más concretamente románico lombardo.
Otro de los motivos por los que se conoce Milán internacionalmente, es por ser una de las capitales mundiales de la moda. Diseñadores como Armani, Prada, Dolce & Gabbana y Versace, tienen su sede en Milán. Sin olvidar la fashion week de Milán. Al igual que otras ciudades como París y Londres, en Milán se celebra semestralmente para mostrar las nuevas colecciones de moda de primavera/verano y otoño/invierno.
En los últimos años, Milán ha ido creciendo cada vez más en el sector comercial y administrativo. Un buen ejemplo, es la famosa Feria de Milán. Esta es la principal exposición comercial de Italia y una de las más grandes de Europa.
Catedral de Milán
La catedral de Milán es un edificio emblemático de la ciudad y uno de los más fotografiados. Su construcción comenzó en 1386 y finalizó en 1965. La arquitectura es de estilo gótico y es tan grande que pueden entrar hasta 40.000 personas.
En su interior guarda varios sarcófagos de arzobispos y otros que participaron en su construcción. El coste de la entrada a la catedral depende de si quieres entrar a un área en específica o a todas ellas. Solo la catedral son 3€.
Si quieres entrar a la zona arqueológica del Baptisterio de San Giovanni Alle Fonti, son 8€. Para entrar al museo del Duomo, son 3€. Sin embargo, a la zona arqueológica del Baptisterio de San Esteban y la Cripta de San Carlos es gratis.
Las entradas combinadas incluyen todas las áreas, solo se diferencian en si subes a la terraza o cómo lo haces. Es decir, la entrada combinada sin subir a la terraza son 8€. La entrada combinada subiendo en escaleras son 13€, mientras que en ascensor son 16€. Si quisieses subir en ascensor y sin hacer cola son 25€.
Museo del Novecento
El museo Novecento fue inaugurado en el 2010 con unas 400 obras del siglo XX, la mayoría de artistas italianos. Los únicos artistas de otras nacionalidades son Picasso, Mondrian, Matisse, Kandinsky, Klee, Léger y Braque.
La entrada normal cuesta 5€ y 3€ para jóvenes entre 18 y 25 años o mayores de 65. El museo es gratis cada primer domingo de mes. Así como cada primer y tercer martes a partir de las 14h. Desde la planta superior del museo tienes una vista a la plaza y al Duomo de Milán.
Piazza dei Mercanti
Creada en la Edad Media, esta plaza era el centro de la ciudad. Las calles cercanas tenían el nombre de las actividades que se llevaban a cabo en cada una: Armorari, Spadari, Cappellari, Orefici, Speronari y Fustagnari.
La plaza del mercado está rodeada de edificios importantes como el Palazzo della Ragione, el palacio conocido como Loggia degli Osii, la Escuela Palatina y la Casa dei Panigarola.
Galería Vittorio Emanuele II
La galería de Víctor Manuel II es uno de los edificios más destacados de Milán. Consiste en dos arcadas con bóveda de vidrio perpendiculares, que se cruzan en el medio. En el lugar del cruce, se forma un octógono.
A pesar de que hay otras galerías similares en otras ciudades europeas como Londres, París, Bruselas, Bucarest, Budapest y Zagreb, la galería de Milán es la más grande y el paso más importante en la evolución del centro comercial acristalado y cerrado.
En el interior hay tiendas, restaurantes y hoteles. Entre las tiendas encontramos joyas, libros, pinturas y, especialmente, prendas de alta costura. Algunas de las marcas que encontrarás aquí son Prada, Massimo Dutti, Gucci y Armani.
Teatro de La Scala
El teatro de La Scala es uno de los teatros de ópera más famosos del mundo. Se inauguró en 1778, aunque fue necesario reconstruirlo tras el bombardeo de la guerra en 1946. En La Scala se estrenaron docenas de óperas famosas de músicos italianos.
Entre el 2002 y 2004, se realizaron restauraciones para crear una zona de servicio, quitaron pinturas y alfombras que tapaban el mármol originario, mejoraron el sistema de sonido, entre otros arreglos. Al inaugurarlo dieron el mismo concierto que en su inauguración, L’Europa riconosciuta de Salieri.
Si lo deseas, puedes reservar el tour del museo y el teatro de La Scala. En este tour de 1 hora tendrás un guía en español que te contará todos los detalles del teatro y de los músicos.
Quadrilatero d’Oro
Las calles vías Della Spiga, Sant’Andrea, Manzoni y Montenapoleone, conforman el espacio más glamuroso de Milán: el cuadrilátero de oro. Estas calles son transitadas por famosos que vienen a comprar en las tiendas de ropa más lujosas y caras de la ciudad.
Está claro que el barrio Quadrilatero d’Oro no es para todos los bolsillos. Aun así, si te interesa comprar alguna prenda de aquí, te gustará saber que también tienen rebajas al final de cada temporada, en los meses de enero y junio. Además, en el outlet Dmagazine venden las mejores prendas de colecciones pasadas a buenos precios. Incluso tienen cuenta de instagram.
Casa Galimberti
Este edificio resalta por su fachada, la cual está decorada con azulejos, hierro forjado y motivos florales en cemento. El arquitecto Giovanni Battista Bossi fue quien lo diseñó en 1903 y hoy en día es una de las fachadas de Milán más fotografiadas en Instagram.
Estación Central de Milán
La estación central de Milán fue construida en 1931, convirtiéndose en una de las principales de Europa. El estilo arquitectónico mezcla varios elementos del Art Nouveau, el Art Deco, entre otros estilos. Además, cuenta con unas cúpulas de acero de 341 metros de largo.
El edificio es realmente imponente y domina la Piazza Duca d’Aosta que está enfrente. En dicha plaza hay una parada de metro, por lo que es fácil llegar a la estación de tren desde cualquier parte de la ciudad.
Bosco Verticale
Entre los rascacielos de Milán, el complejo Bosco Verticale es uno de los más fotografiados. Consta de dos rascacielos residenciales, en cuyos balcones sobresalen dos mil especies vegetales.
Fue diseñado por el Boeri Studio con un claro objetivo medioambiental. Para empezar, crea un ecosistema para los pájaros e insectos, disminuye la contaminación acústica y depura el aire. Estos son solo algunos de los muchos beneficios que ha brindado este aumento de biodiversidad en Milán.
Cementerio Monumental de Milán
Al igual que los cementerios de París, de Edimburgo y muchos más, el cementerio monumental de Milán también merece una visita. Destaca por la gran cantidad de tumbas y monumentos artísticos que posee. Fue diseñado por el arquitecto Carlo Maciachini, con la idea de unificar otros cementerios que estaban esparcidos por la ciudad.
El cementerio monumental abrió en 1866 con esculturas contemporáneas y clásicas. Así como templos griegos, obeliscos y otras obras como una versión a escala de las columnas de Trajano de Roma.
La entrada es gratuita y abre todos los días de 8h a 18h, excepto los lunes.
Parque Sempione
En 1989, reemplazaron una plaza utilizada por los militares para entrenar y lo convirtieron en este parque de 386 mil m². En el parque no solo hay una gran cantidad de árboles de todo el mundo, sino también árboles monumentales como un olmo, un castaño de Indias y un plátano.
Hablando de monumentos, aquí encontramos el palacio de la Triennale, el Arco de la Paz, la Arena de Milán, el Acuario cívico y la Torre Branca.
La construcción del Arco de la Paz había comenzado en 1807 por orden de Napoleón. Sin embargo, no fue completado debido a la caída del Reino de Italia en 1814. No fue hasta que el emperador Francisco I de Austria lo continuó, que finalmente se terminó de construir en 1838.
Castello Sforzesco
El castillo Sforzesco fue mandado a construir en 1360 por la familia Visconti. En 1450, Francisco I Sforza se apoderó del castillo y lo reconstruyó para hacerlo su residencia. Sforza contrató escultores, arquitectos y pintores para decorar el castillo a su gusto. El mismísimo Leonardo da Vinci pintó frescos en algunas de las habitaciones.
Con el paso de los años, el castillo fue cambiando de dueños hasta que a día de hoy se ha convertido en un conjunto de museos de arte. El castillo es de estilo renacentista y gótico, con dos torres circulares y una torre en el centro llamada Torre del Filarete.
La entrada al castillo es gratis, solo tienes que pagar 10€ si quieres visitar los museos. La entrada reducida cuesta 8€ y el primer domingo de cada mes cuesta 5€.
Pinacoteca de Brera
La colección de pintura italiana de la Pinacoteca de Brera es una de las más importantes de Italia. Así como uno de los mayores museos de Europa. Napoleón Bonaparte creó el museo en 1809 como hermano italiano del Louvre.
Algunas de las obras de arte más destacadas de la pinacoteca son: La Piedad (1470) de Giovanni Bellini, La Sacra Conversazione (1472) de Piero della Francesca, Cristo Muerto (1478) de Andrea Mantegna, entre otras pinturas.
La entrada al museo es de 12€, 8€ para jóvenes entre 18 y 25 años y gratis el primer domingo de cada mes. Aunque el patio interior es gratuito en todo momento y merece la pena entrar al menos hasta aquí.
Barrio de Brera
El barrio de Brera es un barrio caro y elegante. Entre sus calles hay boutiques de moda, restaurantes y cafeterías, donde probar la gastronomía local. Mientras que por la noche es un lugar con mucho ambiente, ideal para salir de copas. Un dato curioso, es que en las noches hay pitonisas que te leerán las cartas o la mano si se lo pides.
«L.O.V.E.»
La escultura L.O.V.E. no es para nada lo que uno esperaría con ese nombre. En realidad, es una escultura de una mano gigante que le está sacando el dedo corazón al edificio de la bolsa que tiene enfrente. Es una escultura provocativa y muy polémica, cuyo acrónimo significa: Libertad, Odio, Venganza, Eternidad.
Iglesia Santa María de las Gracias
La iglesia cuyo nombre italiano es Santa Maria delle Grazie, tiene además un convento de la Orden de Predicadores de Milán. Resalta principalmente por la pintura de La última cena de Leonardo da Vinci que se encuentra en el refectorio del convento.
De igual modo, en la parte más antigua de la iglesia hay otros frescos como la Historia de la Pasión de Gaudenzio Ferrari y La coronación de espinas de Tiziano, el cual se halla ahora en el Louvre de París.
La entrada a la iglesia es gratuita. No obstante, para ver el fresco de La última cena en el comedor del convento, es necesario pagar 10€. Además, es posible visitarlo todos los días, excepto los lunes.
Basílica de San Ambrosio
Aunque el Duomo de Milán es un símbolo de la ciudad, los locales tienen en gran estima la basílica de San Ambrosio. Fue levantada entre el año 379 y 386 por orden del obispo san Ambrosio, siendo una de las iglesias más antiguas de Milán.
En los terrenos de la basílica habían sepultado a cristianos que fueron martirizados en las persecuciones romanas. En su construcción utilizaron materiales baratos como ladrillos, piedra y yeso blanco, que consiguieron localmente. Se reusaron a utilizar materiales traídos de Oriente, debido a que no pensaban en lo material, sino en lo espiritual.
En el exterior tiene un par de logias, típicas de la arquitectura italiana de aquel entonces. Estas consisten en una galería exterior con arcos y columnas, que aunque está techada, permanece abierta por los lados. El interior de la basílica tiene una estructura de bóveda de crucería. La entrada es gratis y puedes llegar fácilmente en metro o en autobús.
Colonne di San Lorenzo
Enfrente de la basílica de San Lorenzo, se levantan las columnas de San Lorenzo desde los tiempos de los romanos. Estas 16 columnas de estilo corintio, fueron removidas de un templo pagado o baño público del siglo II.
La plaza en donde están paradas las columnas, es un área muy concurrida. Especialmente en la noche, ya que los jóvenes suelen reunirse aquí antes de dirigirse a un bar o restaurante.
Barrio Navigli
El barrio Navigli es el más alternativo de Milán y conocido por sus canales. Hoy en día solo quedan un par de ellos, el Naviglio Grande y Naviglio Pavese. Sin embargo, anteriormente había una extensa red de canales que sirvió de ruta de acceso al centro de Milán desde otras partes de Italia.
El barrio Navigli parece estar dividido en base a sus canales. Por una parte, a ambos lados del Naviglio Grande se encuentran dos calles principales, llenas de restaurantes con terrazas y mercadillos de antigüedades -los últimos domingo de cada mes-. También es recomendable una visita a la Chiesa di San Cristóforo y el Callejón de las lavanderas.
Por otra parte, el Naviglio Pavese, tiene un ambiente juvenil y underground. Es aquí donde los jóvenes salen de fiesta por las noches.
¿Qué comer en Milán?
Además de la famosa comida italiana como la pizza y la pasta, en Milán hay otros platos de la gastronomía italiana que tienes que probar. El panzerotto, el cual es un bollo de pan relleno de tomate y mozzarella, que puede ser frito o al horno. A pesar de que son originarios de la región de Puglia, es imprescindible que pruebes uno en el horno de Luini.
En caso de que visites Milán en navidad, tienes que probar el panettone. Este sí que es originario de Milán y es muy famoso en el resto del mundo.
Si de bares se trata, tienes que conoce el bar más pequeño del mundo, el Backdoor 43. Cuenta con tan solo 4 metros cuadrados y cavidad para cuatro sillas. Se ha vuelto tan popular que se hacen colas afuera para la ventanilla y necesitas una reserva de dos semanas previas para poder sentarte dentro.
¿Eres amante de la cerveza artesanal? Entonces no puedes perderte el Birrificio Lambrate. Ofrecen una variada selección de IPAs y Stouts, además de comida para acompañar.
Excursiones desde Milán
Desde Milán puedes ir a otras ciudades en tren como Roma, Florencia, Venecia, Bérgamo e incluso a las Dolomitas. Yo utilicé el pase de interrail para moverme de una ciudad a otra y es perfecto, ya que pagas un monto fijo y listo. Además de que te permite viajar a otros países europeos.
Otra opción son los tours guiados, porque los reservas y te despreocupas de todo lo demás. Por ejemplo, puedes hacer una excursión de un día al Lago di Como y Bellagio o una excursión de Milán a Verona y el lago Garda.
¿Dónde dormir en Milán?
Si quieres ahorrar dinero y quedarte en casa de locales, tienes la opción de utilizar Couchsurfing para encontrar alojamiento gratis.
Por el contrario, puedes buscar hospedaje en Booking o Aibnb. En ambos podrás comparar los diferentes precios, junto con las reseñas de los anteriores huéspedes y escoger el que mejor te convenga según la distancia y el precio.
Viaja seguro en todo momento
Todo viajero sabe que los viajes están llenos de imprevistos y cualquier cosa puede pasar. Por eso, te recomiendo que cuando viajes contrates un seguro de viaje en el que confíes y sepas que te cubrirá cualquier eventualidad a ti o a tus acompañantes.
Si no sabes cuál escoger y me preguntas a mi, te diría que utilices Iati Seguros. Este es el seguro por excelencia de los viajeros, recomendado por muchos por su buen servicio y el que utilizo yo misma. Tienen varias modalidades dependiendo del tipo de viaje que hagas, si es corto o largo, por varios países, si viajaes en familia o haces un viaje de mochilero, incluso para un viaje de estudios, entre otros.
