Desde que escuché hablar sobre Florencia, la frase siempre iba acompañada de las palabras «es la ciudad más bonita que he visto» o «es una de las ciudades más bonitas del mundo». Así que, por supuesto, mis expectativas eran altas antes de visitar esta ciudad. Por suerte, no me defraudó aún cuando viajé en pleno invierno, época en la que los colores se ven más apagados y las calles más frías.
Florencia es la capital y ciudad más poblada de la región de la Toscana. Incluso fue capital de Italia entre 1865 y 1871. Su mejor época dicen que fue durante el reinado de la dinastía Médici, cuando se estableció el Gran Ducado de Toscana.
En la Edad Media, Florencia fue un centro cultural, económico y finaciero de gran importancia. Luego, a mediados del siglo XIV, la ciudad vio originarse el estilo del Renacimiento. Asimismo, es considerada la cuna del arte y la arquitectura. No por nada el centro histórico de Florencia ha sido declarado Patrimonio de la Humanidad.
Para conocer Florencia no solo has de visitar los lugares turísticos más emblemáticos, como la impresionante catedral de Florencia, sino también probar su comida. La gastronomía habla mucho de una ciudad y qué mejor lugar para degustarla que en Italia. Al final del post te anoto varios restaurantes y locales de comida donde los mismos florentinos adoran ir. Tienes opciones para cada comida del día, ¡con alternativas vegetarianas!
A continuación, te dejo un itinerario para conocer Florencia en dos días. Dependiendo de lo que visites, podrías visitar Florencia en un día si tienes mucha prisa. No obstante, dos sería el mínimo para que lo veas todo con calma y a buen ritmo.
Día 1
Plaza Michelangelo
Es el lugar ideal para comenzar tu ruta por Florencia. Desde esta plaza tienes la mejor vista panóramica de la ciudad y podrás hacerte una idea de todo lo que tienes por descubrir. Puedes llegar a pie o tomando el bus número 13, el cual te deja justo enfrente de la plaza.
En el momento de la construcción de esta terraza panorámica, en 1869, Florencia era la capital del país y pasaba por una renovación urbanística. Esta renovación fue considerada como el renacimiento burgués de Florencia. El mismo arquitecto que diseñó la plaza, construyó una logia para exponer las obras de Miguel Ángel. Sin embargo, dicho museo nunca se llegó a construir y, en cambio, la logia es ocupada ahora por un restaurante.
Basílica de San Miniato al Monte
Subiendo un poco más desde la plaza encontraremos la basílica Menor, la cual es un buen ejemplo del románico toscano. Su fachada fue inspirada en un clasicismo geométrico que se asemeja a los mármoles de los edificios romanos.
Cuenta la leyenda que la basílica está situada donde vivió un ermitaño del año 250. Desgraciadamente, fue decapitado por orden del emperador Decio durante una persecución anticristiana. Tras convertirse en el primer mártir de Florencia, se levantó un santuario en este lugar. Con el tiempo, este se convirtió en capilla hasta que en 1013 construyeron la iglesia que vemos hoy
Su planta interior difiere ligeramente de otras iglesias. Esto se debe a que el presbiterio y el coro están sobre una plataforma, mientras que la cripta está justo debajo. Además, el pavimento en el interior de la basílica se ha conservado en perfecto estado desde 1207 e incluso se le considera uno de los mejores de la ciudad.
La entrada es gratuita, por lo que merece una visita para detallar todos sus detalles arquitectónicos y el arte que guarda dentro. Sin olvidar que desde la entrada tendrás una magnífica vista hacia la ciudad.
Rosaleda de Florencia
En italiano se llama Giardino delle Rose a Firenze y fue diseñado por el arquitecto Giuseppe Poggi, el mismo que construyó la plaza de Miguel Ángel. En un principio era un jardín privado, hasta que más adelante se abrió al público. Actualmente, cuenta con una colección de nada menos que 1000 variedades de rosas.
Aunque antes solía abrir solo en primavera, ahora está abierto durante todo el año y es gratis entrar. La visita la puedes hacer entrando por su puerta superior e ir descendiendo hasta salir por la parte inferior del jardín. Así verás las donaciones japonesas, las esculturas belgas y los miradores que hay por todo el jardín.
Jardín de Bóboli
El jardín de Bóboli se encuentra justo detrás del palacio Pitti y se extiende por unas 4,5 hectáreas. El jardín mezcla la naturaleza con el arte, por lo que podrás encontrar piezas como un ninfeo, una fuente de Neptuno y una estatua de la diosa Fortuna. Dentro de las inmediaciones del jardín hay también un teatro, pero no cualquier teatro. En este en concreto se presenciaron algunas de las primeras óperas de todo el mundo y también representaron obras de teatro para la cultivada corte florentina.
Puedes hacer un camino recto por el centro o moverte en zig zag. La segunda opción es mejor si quieres ver cada recoveco y lugares esconcidos del jardín. Eso sí, de esa forma demoras dos o tres horas para verlo en su totalidad. El precio de la entrada varía según la época del año. Entre noviembre y febrero cuesta 6 €, mientras que de marzo a octubre cuesta 10 €.
Palacio Pitti
Este palacio perteneció a la familia Pitti, quienes eran rivales de los Médici. Dicen que Luca Pitti quería un palacio que superase al palacio Medici Riccardi, así que mandó a construir este en 1458. Debido a eso, hizo requerimientos como que las ventanas fuesen más grandes. Irónicamente, los Médici compraron el palacio Pitti en 1549 e hicieron obras para ampliarlo y compraron el terreno donde ahora está el jardín de Bóboli.
En su interior se encuentra la galería Palatina, los apartamentos Reales, la galería de Arte Moderno, el museo de la Plata, así como el museo de la Porcelana, la galería de Trajes y hasta un museo de Carruajes. Puedes entrar a visitarlos pagando 13 € y para los menores de 25 años cuesta 6,50 €. Si tienes suerte y en tu viaje a Florencia coincide que vas un primer domingo de mes podrás entrar gratis.
Plaza Santo Spirito
La plaza Santo Spirito está rodeada de restaurantes, tiendas de artesanías, estudios de artistas y todos los días montan un mercadillo. Además, también hay locales nocturnos. Lleva su nombre por la basílica de Santo Spirito que domina la plaza.
A dos calles de la plaza Santo Spiritu, en la via Serragli, encontrarás gran número de tiendas de antigüedades, ropa vintage y todo tipo de curiosidades. Vale la pena un paseo por aquí para echarle un ojo a las vidrieras de camino al río Arno.
Puente Santa Trinidad
Este es el puente en arco elíptico más antiguo del mundo que data de 1569. Los tres anteriores fueron destruidos por la crecida del río. En 1608 se añadieron las figuras de primavera, verano, otoño e invierno en honor a la boda entre Cosimo II de Medici y María Magdalena de Austria.
Durante la Segunda Guerra Mundial el puente fue destruido por los alemanes, aunque por suerte pudieron rescatar algunas de las piedras del río y reconstruirlo en 1958. A pesar de que faltaba la cabeza de la figura de primavera, la pudieron encontrar en el lecho del río en 1961.
Via dè Tornabuoni
La Via Tornabuoni es una de las calles más lujosas y elegantes de Florencia desde el renacimiento. Antes de eso, en el siglo XIII, empezaron a construir viviendas, torres y posadas con mayor densidad. Para el siguiente siglo, la calle ya ostentaba de varios palacios de gran tamaño. Finalmente, en el siglo XV construyeron el palacio Tornabuoni y el palacio Strozzi como bienvenida al Renacimiento.
En la época ducal llegaba hasta la via Tornabuoni los desfiles de carruaje que venían del palacio Pitti y pasaban por el puente Santa Trinidad. Además de estos desfiles, también se celebraban marchas, carreras de caballo y juegos deportivos.
En la actualidad, encontrarás las mejores boutiques de diseñadores de alta moda y joyería. Esto ha significado que con el tiempo otros negocios diferentes han tenido que dar paso al de la moda, lo que ha dado como resultado que esta calle esté vacía fuera de los horarios de apertura de sus tiendas.
Palacio Strozzi
De entre todos los palacios que se ubican en la via Tornabuoni, el palacio Strozzi es sin duda uno de los palacios renacentistas más importantes de Florencia. Filippo Strozzi fue quien mandó a construir el palacio tras permanecer en el exilio entre 1434 y 1466 y volver con más ganas que nunca de levantar un palacio superior al de los Médici.
Comenzaron las obras en 1489, momento para el cual ya se habían derribado 15 edificios y hecho una prueba en madera. Desgraciadamente, Filippo falleció dos años después y sus herederos tuvieron que continuar con su gran sueño. No sin antes pasar por varias dificultades como que los mismos Médici consfiscaron el edificio durante 30 años. Finalmente, el palacio fue terminado en 1538.
Dejó de pertenecer a la familia Strozzi en 1937 y después de una restauración, se cedió al Estado en 1999. Ahora es utilizado por el Gabinete Vieusseux y el Instituto Nacional de Estudios sobre el Renacimiento. Por último, el palacio Strozzi alberga cada año una exposición de arte contemporáneo. La entrada cuesta 13 € y la puedes comprar online desde la página oficial del palacio.
Mercato del Porcellino
Conocida en italiano también como loggia del Porcellino o loggia del Mercato Nuovo. Para aclarar, una lógia es una galería exterior con arcos sobre columnas, techada y abierta en uno o más lados. Así mismo es este conocido mercado que en sus inicios vendía seda y objetos preciosos, agregando después los sombreros de Florencia. En la actualidad, se vende mayormente souvenirs.
En el centro del mercado se encuentra la Piedra del Escándalo, esta forma un círculo de mármol bicolor y era aquí donde castigaban a los deudores durante el Renacimiento.
Fontana del Porcellino
La fontana del Porcellino es en realidad un jabalí de bronce que se encuentra al lado sur de la loggia del Mercato Nuovo desde por lo menos el año 1640. Este tiene su origen en la obra en mármol de época romana conservada en la sección clásica de la Galería Uffizi. Los Médici la convirtieron en fuente y así los vendedores podían hidratarse durante su jornada de trabajo.
La tradición dicta que si frotas el hocico del jabalí, colocas una moneda en su lengua y esta atraviesa las rendijas a sus pies, significa que volverás a Florencia. El truco está en utilizar monedas grandes para que se deslice y caiga mejor. Luego, el dinero recaudado es donado en su totalidad a la Opera della Divina Provvidenza Madonnina del Grappa, una institución católica caritativa.
Es curioso que una copia de esta escultura aparece en las películas de Harry Potter. Primero en Harry Potter y la cámara de los secretos la vemos en dos escenas en las escaleras de Hogwarts y luego en la segunda parte de Harry Potter y las reliquias de la muerte, la estatua se encuentra en el Salón de los Menesteres.
Que por cierto, si te interesa Harry Potter te gustarán otros posts que tengo sobre la Ruta de Harry Potter en Londres, Ruta de Harry Potter en Edimburgo y la Expocisión de Harry Potter que hace gira por Europa.
Plaza de la Señoría
Se encuentra en el centro de la Florencia medieval y es el corazón de la vida social en esta ciudad. Tiene forma de «L» y a cada lado hay todo tipo de edificios importantes como el palacio Viejo, la lógia de la Señoría o el palacio Uguccioni.
Asimismo, resaltan las estatuas que además de decorar la plaza, también representan un ciclo alegórico laico único en el mundo. Enfrente del palacio Viejo y se sitúan las siguientes estatuas (de izquierda a derecha):
- Marzocco: este se ha convertido en el símbolo de Florencia y se trata de un león con una pata sobre el emblema con el «giglio» florentino. Esta es en realidad una copia y la original se encuentra en la galería del Bargello junto con otras grandiosas obras renacentistas.
- Giuditta: esta estatua representa la autonomía política de la República Florentina y fue sacada a la fuerza del palacio Médici, simbolizando la victoria del pueblo contra los tiranos. Aún tras la vuelta de los Médici al palacio, la estatua se quedó fuera para no ofender al pueblo.
- David de Miguel Ángel: esta es otra representación del enfrentamiento de los Médici contra la República. Miguel Ángel creó esta estatua (en realidad esta es una copia) en 1500 en el que David ejemplifica al pueblo que derrota al tirano con la ayuda de Dios.
- Hércules y Caco: esta estatua representa la victoria con la fuerza y la astucia contra los malvados.
- Termini mármolrey: estas dos estatuas se encuentran a cada lado de la entrada principal. Son una tipología de la estatuaria clásica, en la versión masculina y la femenina.
Además de estas estatuas, no podemos dejar de mencionar la Fuente de Neptuno, quien al parecer no es muy apreciado por los florentinos. Muy cerca está estatua ecuestre de Cosme I, uno de los miembros de los Médici.
Palacio Viejo
Este palacio pasó por varios nombres según las épocas. Al principio se llamaba palazzo dei Priori, luego palacio de la Señoría (el organismo principal de la República florentina). Más tarde se le cambiaría el nombre a palacio Ducal mientras Cosme I de Médici residía en él, hasta que se mudó al palacio Pitti y se empezó a llamar palacio Viejo.
Su construcción se realizó entre 1299 y 1314 y se vieron involucrados arquitectos y artistas de renombre. Incluso Leonardo da Vinci pintó uno de los murales en su interior, la batalla de Anghiari. Mientras que Miguel Ángel pintó el mural de la batalla de Cascina. Ambos se encuentran en el Salón de los Quinientos, uno de los más importantes del palacio.
La entrada al palacio es de 10 € para los adultos, 8 € para los jóvenes de entre 18 y 25 años y es gratis para los menores de edad y mayores de 65 años. Si además quieres subir a la torre son 4 € más.
Lógia de la Señoría
El nombre en italiano es Loggia della Signoria y se construyó para dar lugar a las asambleas públicas populares y las ceremonias oficiales de la República florentina. La estructura es de estilo gótico, a pesar de eso llegaron a colocarle algunos detalles renacentistas.
Una vez se creó el Gran Ducado de la Toscana y se eliminaron las instituciones repúblicanas, este espacio se destinó a la exposición de algunas de las mejores obras maestras de la Escultura. Esto quiere decir, que fue uno de los primeros espacios expositivos del mundo y hasta fue imitado en otras ciudades como el que puedes ver en Múnich.
Dos enormes leones te dan la bienvenida a la lógia. El resto de las esculturas están colocadas, según Cosme I de Médici, por orden político. De hecho, la estatua más importante del conjunto es la de Perseo con la cabeza de Medusa porque representa el corte de la experiencia republicana de la ciudad.
Galería Uffizi
La Galleria degli Uffizi cuenta con una de las más antiguas y famosas colecciones de arte del mundo. Lo cierto es que al momento de construir el palacio Uffizi se pensaba usar para las oficinas de las magistraturas florentinas, ya que el palacio Viejo había quedado pequeño.
Sin embargo, cuando la dinastía de los Médici terminó, las obras de arte estuvieron a punto de ser enviadas a Viena pero, por suerte, en el testamento de Ana María (la última duquesa de los Médici) había especificado que la colección sería donada al pueblo y, por ende, permanecería en su lugar. Desde entonces, la galería Uffizi abrió sus puertas al público como museo.
La entrada tiene un valor de 20 € y si quisieras ir también al palacio Pitti y al jardín de Bóboli, hay un «PassePartout» de 5 días que te permite entrar a los tres por 38 €.
Puente Viejo
El Ponte Vecchio es de la época medieval y es tan conocido a nivel mundial que se ha convertido en un símbolo de Florencia. Aunque en realidad se cree que primero fue construido en madera por los romanos, en 1345 lo volvieron a construir en piedra tras varios daños y una inundación que lo tumbó.
Los comerciantes utilizaron el puente para vender sus productos colocando mesas a ambos lados y se beneficiaban de una exención de impuestos por estar en el puente. Con el tiempo disminuyeron la cantidad de comerciantes, pero expandieron sus puestos de venta.
Durante la Segunda Guerra Mundial el puente Viejo se salvó porque Hitler había venido previamente a Florencia y ordenó al ejército alemán no destruirlo. Así que ha podido permanecer intacto todo este tiempo.
Día 2
Plaza de la República
Esta plaza fue construida con motivo del cambio de capital de Italia a Florencia. Aunque antes de que esto sucediera, en este lugar existió un foro romano y luego, en la Edad Media, era un mercado. Todo eso cambió en el siglo XIX para redefinir la ciudad y solucionar los problemas de insalubridad que había en el viejo mercado.
No obstante, las obras no habían terminado e incluso las paralizaron cuando se cambió la capital a Roma. En 1895, después de que los florentinos se quejaran, reanudaron las construcciones. Derribaron algunas de las casas de los alrededores para lograr la idea de una plaza rectangular porticada y con un arco de triunfo.
El cambio hizo de esta zona un sofisticado barrio burgués y pronto se instaló el Hotel Savoi, la galería comercial Trianon, los cafés con terraza Paszkowski, Gilli y Giubbe Rosse.
Catedral de Florencia
El nombre completo es catedral de Santa María del Fiore, aunque se le conoce también por Duomo. Este es uno de los edificios más grandes de la cristiandad y una de las obras maestras del arte gótico y del primer Renacimiento italiano. Lo que más resalta de la catedral es la majestuosa cúpula de Filippo Brunelleschi, la cual tiene una altura de 114,5 metros.
Brunelleschi tuvo la oportunidad de diseñar la cúpula por un concurso que se realizó de manera que se ofrecieran diferentes ideas de cómo llevar a cabo tan difícil tarea. Así que presentó un modelo que sirvió de guía para los artistas, pero no detalló todos los pasos para que él tuviese el control de la construcción. Su idea permitió construir la primera cúpula octogonal sin el soporte de un armazón de madera.
Hubo una primera fachada pero los Médici la mandaron a derribar porque no se correspondía con la moda del Renacimiento. Algunas de las esculturas originales de esa fachada están ahora en el Louvre, en el museo de la Ópera del Duomo y en el museo de Berlín.
Unos años más tarde se abrió otro concurso para quien diseñara la fachada y se finalizó en 1887 ganando el arquitecto Emilio De Fabris. Las tres puertas de bronce en su fachada muestran las escenas de la vida de la Virgen. También colocaron en la fachada a los 12 apóstoles y la Virgen con el Niño.
En el momento en que se terminó era la catedral más grande de Europa. Hoy en día es superada por otras como la basílica de San Pedro en la Ciudad del Vaticano, la catedral de San Pablo en Londres, la catedral de Sevilla y la catedral de Milán.
La entrada cuesta 18 € pero te incluye también la cúpula, el baptisterio, la cripta, el campanario y el museo de la Ópera del Duomo. Eso sí, debes tener los hombros cubiertos y no llevar vestidos o pantalones demasiado cortos.
Campanario de Giotto
Este se encuentra independiente de la catedral y contiene solo la campana, de esa forma se evitan los daños por vibraciones a la iglesia. Su base cuadrangular es de 14,45 metros y tiene 84,70 metros de altura.
En caso de que quieras ver los originales de los bajo relieves y las esculturas que adornan el campanario, tendrás que visitar el museo de la Ópera del Duomo que está justo detrás de la catedral.
Baptisterio de San Juan
Al principio se creyó que el baptisterio era creación romana, más adelante se demostró que no era así. Aunque sí tiene ruinas romanas debajo de él. De igual forma, hay registros de que fue construido sobre otro baptisterio.
En 1059, se construyó el nuevo baptisterio con forma octogonal al estilo romano. Se diseñó con 8 lados en honor a los 8 días para la Resurrección de Jesucristo. Cada uno estaba cubiertos de arenisca, hasta que se colocó el mismo mármol de la catedral y del campanario.
El baptisterio se terminó en 1128, sin embargo, se hicieron algunas ampliaciones y adiciones como las tres puertas de bronce. Al momento de diseñar la puerta del lado Norte, se convocó otro concurso en el que ganó un joven de 23 años, Lorenzo Ghiberti.
Fueron necesarios 21 años para que los 20 paneles estuviesen terminados. Cada uno muestra una escena bíblica del Nuevo testamento. El mismo Miguel Ángel las llamó «Puertas del Paraíso» y desde entonces se quedaron con ese nombre.
Un dato curioso del baptisterio es que todos los católicos florentinos eran bautizados aquí hasta el siglo XIX
Museo de la Ópera del Duomo
Con la entrada de 18 € que mencionaba antes, podrás entrar también a este museo. Vale la pena si ya has ido a los demás museos y te llama la atención ver las obras originales de la catedral, el campanario y el baptisterio.
Algunas de las salas están dedicadas al escultor y arquitecto Brunelleschi, otras muestran las herramientas utilizadas en la época, además de algunas maquetas.
Basílica de San Lorenzo
Cosme Médici la mandó a construir y se inauguró en 1470. En su interior hay una cripta, una sacristía vieja, una nueva y la capilla de los Médici. En total están sepultadas las tumbas de 50 miembros de la familia de Medici.
En la cripta se encuentran los restos de los duques, sus consortes y familiares. Desde la cripta se accede a la capilla de los Príncipes, donde a su vez están los restos de otros miembros de los Médici, excepto de Cosme el Viejo y de Donatello que están en una cripta inferior a la que no se puede acceder desde aquí.
La sacristía nueva fue diseñada por Miguel Ángel con un programa escultórico de gran importancia de los años 1521-1534. Por otro lado, la capilla de los Príncipes tiene un revestimiento de mármol coloreado incrustado con piedra dura que data del siglo XVII. También destaca la capilla del Tesoro en donde están los relicarios y objetos de orfebrería de la familia.
La entrada a la basílica de San Lorenzo cuesta 3,5 €, mientras que la entrada a la capilla de los Médici cuesta otros 8 €.
Mercado central de Florencia
Al desaparecer el mercado que estaba en la plaza de la República, el mercado del porcellino ya no era suficiente. Por este motivo, se construyeron otros más y entre ellos el mercado central de Florencia, también conocido como mercado de San Lorenzo. Es el resultado del nuevo urbanismo en Florencia y se inauguró en 1874.
Como cualquier otro mercado de una ciudad, es el lugar ideal para probar productos frescos italianos. Aquí encontrarás diferentes tipos de quesos, cervezas, pizzas y gran variedad de restaurantes. A su vez, alrededor del mercado hay un mercadillo callejero donde podrás encontrar otros artículos y también souvenirs.
Basílica de Santa Maria Novella
Esta iglesia es una de las más importantes de Florencia, incluso está declarada Patrimonio de la Humanidad. La fachada de mármol blanco y verde oscuro es de estilo renacentista florentino, aunque aún tiene algunos de talles góticos que fueron mezclados sutilmente con el renacentista.
En su interior alberga varias obras de arte como el fresco de La Trinidad. Al mismo tiempo, también se encuentra la farmacia de Santa María Novella. Esta es la farmacia más antigua de Europa con una actividad continuada desde 1221. Para poder apreciar todo esto, has de pagar 7,5 €.
Antigua carcel de Florencia
Más alejado del centro histórico de Florencia se encuentra un conjunto de edificios que anteriormente eran una prisión y hoy en día da paso a viviendas, tiendas y hasta un restaurante llamado Le Carceri. Es curioso como aún se ven los restos de su pasado, pero con un toque colorido y animado.
En la noche es frecuentado por los estudiantes quienes van por el buen ambiente y, en especial, por el Aperitivo que ofrece Le Carceri. Este consiste en pagar solo la bebida y tienes una mesa llena de diferentes platos para servirte estilo buffet. Si aún tienes tiempo en Florencia es un sitio que no te puedes perder.
Actividades que hacer en Florencia
Florencia está llena de todo tipo de leyendas que te sorprenderán, si eres de los que te gusta saber sobre este tipo de historias el Tour de los misterios y leyendas de Florencia es para ti.
También puedes hacer un tour de enoturismo por la región del Chianti, partiendo desde Florencia. De esta forma, estarás conociendo las bodegas, viñedos y productos locales. Si prefieres que se centre más en la comida, tienes la opción de un Tour gastronómico por Florencia.
Si has visto la serie de Los Médici o simplemente tienes más curiosidad sobre esta familia, te gustará el Tour de los Médici por Florencia. Por último, te recomiendo un tour en barco por el río Arno, verás la ciudad desde otra perspectiva.
También puedes hacer excursiones fuera de Florencia yendo un día a Pisa, tres días a Bolonia, un día a San Marino u otras tantas ciudades encantadoras de Italia como Roma, Venecia o Milán.
Dónde comer en Florencia
En mi tiempo en Florencia fui a varios restaurantes y locales de comida que me recomendaron dos amigas florentinas que han pasado su vida en esta ciudad. Desde ya te confirmo que ninguno me decepcionó, así que te los comparto para que también te puedas dar el gusto de probar comida local.
En primer lugar, las pizzas de Pizzagnolo son espectaculares. En La Pagnotta podrás probar unos dulces deliciosos y típicos de aquí. Si se te antoja un helado, aunque sea pleno invierno, la Gelateria Dei Neri es altamente recomendada con montones de sabores diferentes.
Si buscas comida vegetariana o vegana el restaurante Il Vegetariano es ideal para ello, ya que tiene mucha variedad de comida italiana sin carne. Si estás buscando un sitio diferente donde sentarte a tomar un café y algún dulce, Libri Liberi Libreria tiene terraza, librería y hasta teatro para que tomes un descanso del paseo por la ciudad.
Mis amigas me recomendaron también unas pizzas fritas (si, fritas. Fue la primera vez que escuché que existían) de la Antica Friggitoria dell’albero que me sorprendieron lo buenas que estaban.
Cómo llegar a Florencia
Aunque Florencia tiene su propio aeropuerto, es pequeño y solo recibe algunos vuelos internacionales; la mayoría son nacionales. En realidad, el aeropuerto de Pisa es el principal de la región de Toscana.
Así que si encuentras un vuelo barato hacia Pisa no lo dudes porque puedes tomar un tren por Trenitalia de Pisa a Florencia y por 9 € estás allí en una hora. Además de que así también visitas Pisa en el mismo viaje.
Si viajas desde otra parte de Italia, la mejor opción siempre será el tren. Los precios son económicos, hay buenas conexiones de una ciudad a otra y es mucho más cómodo que viajar en bus. Aunque si quieres viajar por tierra desde otros países de Europa, igual puedes considerar Flixbus, porque tiene conexiones económicas a los países vecinos.
Cualquier duda sobre cómo escoger el mejor transporte puedes resolverla en el post Transportes para viajar por Europa barato. Igual te dejo algunos consejos sobre cómo viajar en bus por Europa en este post.
Dónde dormir en Florencia
Si quieres ahorrar dinero y quedarte en casa de locales, tienes la opción de utilizar Couchsurfing para encontrar alojamiento gratis.
Por el contrario, puedes buscar hospedaje en Booking o Aibnb. En ambos podrás comparar los diferentes precios, junto con las reseñas de los anteriores huéspedes y escoger el que mejor te convenga según la distancia y el precio.
Viaja seguro en todo momento
Todo viajero sabe que los viajes están llenos de imprevistos y cualquier cosa puede pasar. Por eso, te recomiendo que cuando viajes contrates un seguro de viaje en el que confíes y sepas que te cubrirá cualquier eventualidad a ti o a tus acompañantes.
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