Dublín fue fundada por los vikingos alrededor del año 841. En el siglo XVII, tuvo lugar la edad de oro de la capital de Irlanda. Durante este tiempo, Dublín fue la segunda ciudad del imperio británico -después de Londres– y la quinta ciudad más grande de Europa. Gran parte de la arquitectura más notable de la ciudad, fue construida en esa época.
Desde 1922, la partición de Irlanda dividió la isla en dos territorios: Irlanda del Norte y República de Irlanda. Irlanda del Norte quedó dentro de Reino Unido, mientras que la República de Irlanda se separó totalmente.
Por otro lado, Dublín ha visto nacer a un gran número de escritores y actores famosos. Algunos de ellos son los escritores Oscar Wilde y Bram Stoker o los actores Michael Gambon, Brendan Gleeson y Colin Farrel.
Cuando fui a Dublín, me acompañó mi hermano durante un mes para estudiar inglés en el SEDA College. Nos hospedamos en el Hostal The Townhouse, que también tiene Hotel Globetrotters en una habitación con literas junto a otras 10 personas más. La verdad es que en aquella altura quedamos descontentos con ese hostal, no sé cómo estará actualmente. En la habitación, en total éramos 2 venezolanos, 8 españoles, un portugués y un italiano.
Si quieres visitar Dublín, te gustará saber que es una ciudad muy animada y con montones de lugares que visitar. Aunque dos o tres días no serán suficientes para verlos todos.
Si dispones de pocos días, te recomiendo que hagas al menos uno de los Free Tour Dublin. De esa forma, podrás visitar lo imprescindible en unas pocas horas, mientras un guía te cuenta la historia detrás de cada lugar. Échales un vistazo, porque incluso hay tours con varias temáticas por si dispones de más tiempo y te has quedado con ganas de saber más. Lo mejor es que son gratuitos, solo tienes que pagar la propina.
A continuación te presentaré 31 lugares que ver en Dublín. Así podrás elegir cuáles quieres ir seguro y prepares tu itinerario.
Spire de Dublín
También se le conoce como monumento de la Luz, es el monumento más alto del mundo, con sus 119 metros de altura. Está construida de acero inoxidable, en medio de una de las calles más céntricas de Dublín, la calle O’Connell. El objetivo al erigir este monumento, era revitalizar esta zona que había decaído desde los años 70.
Famine Memorial
Este es un conjunto de esculturas que retrata el período de la gran hambruna que sufrió el país. Entre 1845 y 1851 más de un millón de irlandeses fallecieron y dos millones emigraron a otros países. La principal causa fue una plaga que padecieron las patatas, dejando a los agricultores sin comida, ni productos que vender.
Al ser un grupo de personas en tamaño real, es más fácil sentirse identificados al caminar entre ellos.
Puente O’Connell
El puente original fue erigido en 1794 con tres arcos simétricos en granito y obeliscos en sus cuatro esquinas. Luego, fue necesario una ampliación para aliviar el tráfico de las calles y tras su reconstrucción, se reabrió en 1988.
En el 2004, dos hermanos pusieron una placa conmemorativa de un padre falso como broma. Nadie se dio cuenta hasta dos años más tarde y aún en el 2019 es posible ver la placa.
Museo Nacional de Cera
Es un museo muy interesante que tiene cientos de figura de cera en diferentes salas, con diferentes personajes de la historia. Al principio del recorrido te vas encontrando con personajes de la historia irlandesa.
Y a medida que vas avanzando más entre sus salas, empiezas a ver a algunos de los personajes famosos de todo el mundo. Tales como el Papa, Cocodrilo Dundee, E.T., las Tortugas Ninjas, Superman, la Princesa Diana, Gollum, Yoda, Anakin Skywalker, Jack Nicholson, David Bowie y muchos muchos más.
La entrada cuesta 16,50€ para los adultos o 14,50€ los estudiantes y jubilados.
Universidad Trinity
El campus de la Universidad de Dublín, Trinity College se extiende a lo largo de 19 hectáreas. El conjunto consiste en algunos edificios antiguos y otros nuevos, además de dos grandes patios en el centro y dos campos de juego. Esta universidad es considerada la mejor del país y una de las mejores del mundo.
Libro de Kells
Dentro de la universidad está la biblioteca de investigación más grande de Irlanda, la biblioteca del Trinity College. En sus estanterías encontrarás más de 4 millones de libros, entre ellos el Libro de Kells. La atracción principal del lugar.
Los monjes celtas crearon este manuscrito ilustrado con motivos ornamentales en el año 800, en un pueblo de Irlanda.Dicho libro es considerado una pieza principal del cristianismo celta y del arte hiberno-sajón. Es una suerte que un libro tan valioso haya sobrevivido desde la Edad Media.
El libro Kells, también llamado Gran Evangelario de San Columba, contiene los cuatro Evangelios del Nuevo Testamento. Actualmente, se encuentra en la biblioteca del Trinity College.
Puedes entrar a la universidad gratis si deseas. No obstante, para entrar a la biblioteca tendrás que pagar una entrada de 13€.
Biblioteca Nacional de Irlanda
Esta biblioteca se construyó en 1890 para coleccionar, preservar y promover los documentos la historia de Irlanda. Aquí puedes consultar, gratuitamente, cualquier libro, mapa, manuscrito, música, periódico o fotografía sobre Irlanda.
Galería Nacional de Irlanda
Abrió en 1864 con una colección de 14.000 obras de arte. Entre ellas 2.500 pinturas irlandesas, españolas, del barroco italiano, francesas, holandesas, entre otras. A lo largo de los años, la galería ha sido ampliada en varias ocasiones para poder dar cabida a todas las obras de arte. Lo bueno es que muchos de los museos en Irlanda son gratuitos y la Galería Nacional de Irlanda es uno de ellos.
Museo Nacional de Arqueología
Este es el principal museo en Irlanda debido a su valiosa colección de objetos desde el medievo y la Edad de Bronce hasta el siglo XIX. Asimismo, también contiene tesoros y objetos vikingos, algunas exhibiciones de Egipto, Chipre y de la época romana.
Parque Merrion
Este es un parque de Dublín con estilo georgiano. Es perfecto para sentarse, relajarse o reunirse para un picnic. Entre los árboles se esconde una escultura de Oscar Wilde y el Memorial Nacional a los miembros de las Fuerzas de Defensa que murieron en el Servicio del Estado.
Se construyó este parque como parte de la Casa Leinster, la residencia aristocrática más grande de Dublín después del Castillo de Dublín. En el siglo XIX todos los aristócratas, los obispos y los ricos vendieron sus casas adosadas del norte de la ciudad, para mudarse a esta área. Rodeados también por los otros parques que se construyeron para complementar: San Stephen Green y Fitzwilliam.
Plaza Grand Canal
Esta es una zona relativamente nueva de Dublín y es donde están algunas de las empresas más reconocidas de la ciudad. Empresas tales como Google, Facebook y Airbnb. La plaza, de un estilo muy moderno, está rodeada de bares y restaurantes. Es un buen lugar para reunirse y pasar el rato a orillas del río. En la noche todo se ilumina y la vista es aún mejor.
Muy cerca está el puente Samuel Beckett, el cual será fácil de reconocer por su forma de arpa. El arpa es un instrumento irlandés por excelencia, tanto es así que podrás encontrarlo en la moneda de euro y el escudo de Irlanda. Este es el segundo puente construido por Santiago Calatrava en la ciudad de Dublín, siendo el primero el puente James Joyce.
Saint Stephen’s Green
Anteriormente era un área verde donde pastaba el ganado, luego pasó a formar parte de una zona residencial de estilo georgiano. Junto con el parque Merrion y el pequeño parque Fitzwilliam que mencioné antes. Actualmente, es un parque público que continúa rodeado de algunas réplicas y unos pocos originales de los edificios de la alta sociedad dublinesa.
El parque tiene una forma rectangular y en el centro un lago enorme con algunos patos. Es otro parque donde podrás hacer un picnic o descansar en el césped en los días de verano.
Arco de fusileros
A la entrada de la calle Grafton, se encuentra el Arco de fusileros. Este fue erigido en 1907 en honor a los oficiales, suboficiales y todos los fusileros que murieron en la Segunda Guerra Boer, entre 1899-1902. De hecho, en la estructura están inscritos los 222 nombres de los fallecidos. La parte principal del arco está hecha de granito, con inscripciones en piedra caliza y un adorno de bronce en el lado frontal.
Calle Grafton
Esta es una calle comercial donde se encuentran gran cantidad de tiendas de moda. A eso se le suman los músicos que vienen a cantar o tocar en esta calle. Se les conoce como «buskers», algunos de ellos han triunfado y ahora son músicos famosos. Incluso el cantante irlandés Bono de U2, suele cantar en esta calle en Navidad.
Estatua de Molly Malone
Molly Malone viene de una canción popular irlandesa que se ha convertido en un himno irlandés, el cual habla de una mujer (real o ficticia) del siglo XVII. Dicha canción, es cantada por un vagabundo en la película de La naranja mecánica (1971) Stanley Kubrick.
Su estatua se encontraba en la calle Grafton, aunque fue trasladada a poco menos de 100 metros para la construcción de una nueva línea del tranvía. Está vestida con un vestido largo de gran escote y lleva el carro donde vendía el marisco.
Galería de la calle George
Este es un mercado con una arquitectura victoriana de ladrillos rojos, inaugurado en 1881. Al principio, no se involucró a los habitantes de Dublín en el diseño, ni construcción del complejo comercial. Ni siquiera se invitó a los locales en la celebración de la inauguración, por lo que el mercado no fue muy apreciado en la ciudad.
Posteriormente, un incendio acabó con el edificio y muchos comerciales se vieron afectados porque no tenían un seguro. Por suerte, la población se unió y reunieron dinero suficiente para su reconstrucción. Esta vez si contrataron a los locales para levantarlo nuevamente con el estilo original. Además de que en su segunda inauguración, en 1894, todos los dignatarios de Dublín estaban invitados.
En la actualidad, puedes encontrar todo tipo de tiendas en su interior. Desde tiendas de ropa de moda, joyería, peluquerías, adornos, libros, souvenirs, etc.
Castillo de Dublín
El castillo de Dublín ha sido utilizado para diferentes funciones a lo largo de los siglos. Fue erigido en 1204 como fortaleza defensiva y después se convirtió en residencia oficial de representantes de la monarquía. También ha servido como sede del gobierno Británico en Irlanda y guarnición militar.
Hoy en día forma parte de las atracciones turísticas y se llevan a cabo conferencias en su interior, así como conciertos y un centro de artes. La entrada normal cuesta 12€ o 10€ tanto para estudiantes como para jubilados.
Dentro del complejo del castillo de Dublín, se encuentra la biblioteca Chester Beatty, la cual abrió en el 2000. Aunque la biblioteca Chester Beatty realmente se fundó en 1950, reuniendo la gran colección el magnate minero Sir Alfred Chester Beatty. La exhibición está dividida en «Tradiciones Sagradas» y «Tradiciones Artísticas», en donde encontrarás textos, manuscritos, pinturas y arte en papel sagrados de las religiones orientales y occidentales.
A diferencia del castillo de Dublín, la entrada a la biblioteca es gratuita. Aunque si lo deseas, puedes hacer una donación en la entrada.
Ayuntamiento de Dublín
El edificio tiene notables ejemplos del estilo arquitectónico del siglo XVIII en Dublín. Para la construcción de su fachada, se utilizó un tipo de piedra caliza del período jurásico llamada Piedra de Pórtland (una isla de Inglaterra). En su interior hay una exhibición de la historia de la ciudad de Dublín y la entrada es gratuita.
Temple Bar
Este es uno de los barrios más conocidos de Dublín. Es la zona de fiesta y donde podrás encontrar todo tipo de bares y restaurantes irlandeses. Entre ellos está el primer restaurante motero de Irlanda, el Thunder Road Café y el famoso Temple Bar. Aunque se dice que el barrio tomó el nombre del bar, en realidad fue el bar que copió el nombre. Dicho nombre viene del gaélico Barra an Teampaill, que significa Camino de Temple.
Lo más irlandés que puedes hacer es venir en la noche, entrar en alguno de los bares y tomar una Guinness. Tal y como hizo Holly en la película de Posdata: Te Quiero (2007) de Richard LaGravanese. Eso sí, ten en cuenta que el Temple Bar estará a rebosar, ya que no es extremadamente grande y muchos quieren entrar. Puedes probar otros bares de la zona, todos tiene un gran ambiente.
Catedral de la Santísima Trinidad
Es una de las dos catedrales medievales más antiguas de Dublín, siendo construida por los mismísimos vikingos en 1028. Desde este terreno alto se divisaba el asentamiento vikingo Wood Quay.
Esta catedral ha sido ampliada en 1152 y luego, en la época victoria, se restauró una parte de ella para evitar su derrumbe. También guardaba el corazón del obispo San Lorenzo O’Toole hasta que lo robaron. Además, cuenta con la cripta catedralicia más grande de las Islas Británicas. En ella, se encuentran objetos históricos irlandeses. El precio de la entrada es de 6,75€ y para los estudiantes o jubilados es de 5,50€.
Dublinia
En una parte de la catedral de la Santísima Trinidad, se encuentra Dublinia. Es un museo centrado en los vikingos y la historia medieval de Dublín. Aquí se recrean las construcciones medievales e incluso hay actores con traje vikingos que te hacen viajar al pasado. El precio de la entrada es de 10€ para los adultos y 9€ para estudiantes y mayores de 60 años.
Iglesia de San Audeon
La iglesia de San Audeon es la iglesia parroquial más antigua de Dublín y todavía se usa como tal. No obstante, ha pasado por varias reformas porque durante un tiempo estuvo muy descuidada. Aun así, tuvo años muy buenos en los que fue considerada una de las mejores iglesias porque la frecuentaban personajes importantes y adinerados.
Catedral de San Patricio
Esta es la otra catedral más antigua de Dublín y en el momento de construirla, en el siglo V, a un lado había un pozo donde San Patricio bautizaba a los que se convertían del paganismo al cristianismo. Luego, en 1191 se deshicieron de la madera para reconstruirla en piedra. La entrada cuesta 6€, pero si eres estudiante queda en 5€
Almacén de Guinness
Este es uno de lugares turísticos de Dublín más visitados. Lo abrieron al público en el 2000 y desde entonces más de cuatro millones de visitantes han pasado por ahí. Tiene siete pisos y un atrio de vidrio en forma de una pinta de Guinness.
Al comenzar los recorridos, primero te encuentras con los principales ingredientes de la cerveza (agua, cebada, lúpulo y levadura) y una presentación del fundador de la cervecería, Arthur Guinness. El resto del recorrido cuenta la historia de la cerveza y su preparación. En el séptimo piso puedes tomar una Guinness en el Gravity Bar mientras tienes una vista hacia Dublín.
La entrada cuesta 18,50€, por lo que es bastante cara. A estas alturas te habrás dado cuenta de que si quieres entrar tanto al Almacén Guinness como a otros lugares de Dublín, te saldrá bastante caro. Por eso, te recomiendo que compres el Dublin Pass. Con unos pocos lugares ya habrás compensado el coste del pase y aún podrás visitar más lugares, logrando ahorrar bastante dinero.
Museo Nacional de Irlanda
Este fue el edificio donde originalmente se fundó el Museo de las Ciencias y las Artes de Dublín en 1890. Luego, en el siglo XIX se dividió el museo y una parte se trasladó a la calle Merrion para fundar el Museo Nacional de Arqueología (que mencioné anteriormente). Este edificio quedó entonces como el Museo Nacional de Irlanda – Artes decorativas e historia.
En este museo encontrarás exhibiciones de muebles, plata, cerámica y cristalería. Además de representaciones del estilo de vida, vestimenta folklórica, dinero y armas. Todo lo que necesitas para adentrarte en el pasado de Irlanda. Al igual que otros museos, la entrada es gratuita.
El Royal Hospital Kilmainham
Inspirado en el Palacio Nacional de Los Inválidos ubicado en París, este hospital se construyó para albergar a los soldados retirados de la armada irlandesa. También tiene un jardín que se extiende a unos 400 metros hacia el oeste y, al final, un cementerio.
Cada año, en el domingo cerca del 11 de julio, se conmemoran a los soldados irlandeses caídos en todas las guerras. Asimismo, el hospital se ha vuelto un lugar muy popular para celebrar conciertos en verano. Aunque sea necesario comprar las entradas para los conciertos, la entrada al hospital y al jardín es gratuita.
Prisión de Kilmainham
Esta antigua cárcel hoy en día se ha convertido en museo, al que puedes entrar por 8 €. En el pasado, jugó un papel muy importante, ya que fue aquí que encarcelaron a muchos de lo líderes de las revueltas independentistas y muchos prisioneros fueron ejecutados dentro de estas paredes.
Además, los presos no era separados por sexo, ni edad. Así que todos convivían juntos. El último preso estuvo hasta 1924, que fue cuando finalmente se cerró la prisión y, posteriormente, en los 70 la restauraron.
La prisión ha servido de escenario para varias películas y vídeos musicales, como por ejemplo The Italian Job (1969), El hombre de Mackintosh (1973), En el nombre del padre (1993) y en el vídeo musical del grupo U2 para la canción A Celebration.
Jardines conmemorativos de la guerra nacional irlandesa
Es un monumento de guerra irlandés, dedicado a los 49.400 soldados irlandeses que fallecieron en la I Guerra Mundial y más de 300.000 irlandeses que sirvieron en todos los ejércitos. En el centro del jardín se encuentra una Piedra del Recuerdo de granito irlandés, que simboliza un altar.
El diseño del área consta de jardines de rosas, varias terrazas, pérgolas y caminos bordeados de impresionantes árboles. Además de dos pares de salas de libros en granito, que representan las cuatro provincias de Irlanda y donde se registran los nombres de todos los muertos.
Parque Fénix
Es uno de los parques urbanos más grandes de Europa. Además de que, entre todas las particularidades que tiene, es muy conocido por albergar una gran manada de ciervos. Estos andan libremente por el parque desde 1660, cuando fueron introducidos por el duque Ormond.
Lo mejor para recorrer este parque es alquilar una bici al entrar. De esta manera, será mucho más fácil ir a todos los puntos importantes del parque e incluso perderte entre sus bosques si quisieras.
Para empezar, puedes visitar el monumento a Wellington. Es un obelisco de 62 metros de altura que hace honor al Duque de Wellington, quien fue un famoso militar, político y estadista irlandés. Muy cerca está la Residencia Deerfield, la cual es la residencia oficial del embajador de los Estados Unidos en Irlanda. Del mismo modo, a pocos metros está la residencia del presidente. También conocida como Áras an Uachtarain.
Otros lugares de interés son el fuerte Magazine, la cruz Papal, el jardín botánico Walled y el castillo de Ashtwon. Este castillo es una torre medieval del siglo XVII que fue restaurada y ahora forma parte del Centro de Visitantes del parque Fénix.
Dicey’s Garden Club
Si quieres ir a un club de fiesta, una recomendación personal es el Dicey’s. Fui con mi hermano y 8 españoles más y lo pasamos de lo mejor. Es un local que cuenta con varias salas y un patio interior. Además de que el ambiente es buenísimo, gente joven de diferentes partes del mundo, muy céntrico y donde la fiesta empieza desde temprano.
Lo mejor es que la entrada es gratuita entre las 16:00 y 18:00. Nosotros fuimos desde las 16h y nos divertimos tanto que nos quedamos hasta la medianoche. Las cervezas cuestan tan solo 2€, cuando en otros lugares cuesta varios euros más. Puedes complementar la cerveza con algo de comer. Como por ejemplo: pescado con patatas, hamburguesas, alitas de pollo, entre otras cosas por 7€ cada uno.
Howth
A media hora en tren de Dublín se encuentra el Cabo de Howth. En los días soleados es un buen lugar para pasar un día de playa. Howth es un pueblo turístico y pesquero, donde podrás visitar la abadía, la tumba megalítica, su castillo y la playa.
Actividades que hacer en Dublín
Lo mejor que puedes hacer para completar tu viaje a Dublín es con actividades y excursiones que enriquezcan la experiencia. Pueden ser tours guiados que te hagan visitar el lugar desde otro punto de vista, tour gastronómicos para una inmersión de lleno en la cultura local, actividades de aventura o en plena naturaleza y un sinfín de opciones más.
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Si aún tienes tiempo para recorrer la isla de Irlanda, te recomiendo que vayas a Galway, los acantilados de Moher, Belfast y la Calzada del Gigante. Son lugares emblemáticos que no querrás perderte.
Dónde dormir en Dublín
Si quieres ahorrar dinero y quedarte en casa de locales, tienes la opción de utilizar Couchsurfing para encontrar alojamiento gratis.
Por el contrario, puedes buscar hospedaje en Booking o Aibnb. En ambos podrás comparar los diferentes precios, junto con las reseñas de los anteriores huéspedes y escoger el que mejor te convenga según la distancia y el precio.
Viaja seguro en todo momento
Todo viajero sabe que los viajes están llenos de imprevistos y cualquier cosa puede pasar. Por eso, te recomiendo que cuando viajes contrates un seguro de viaje en el que confíes y sepas que te cubrirá cualquier eventualidad a ti o a tus acompañantes.
Si no sabes cuál escoger y me preguntas a mi, te diría que utilices Iati Seguros. Este es el seguro por excelencia de los viajeros y recomendado por muchos por su buen servicio. Tienen varias modalidades dependiendo del tipo de viaje que hagas, si es corto o largo, por varios países, si viajaes en familia o haces un viaje de mochilero, incluso para un viaje de estudios, entre otros.
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Mi consejo, en caso de que quieras visitar todos los lugares, es que primero compres el Dublin Pass y visites todos los sitios que sean pagos. Después, otro día visitas los museos que son gratuitos. Y, de esta manera, los habrás visitado todos ahorrando mucho dinero.
Por último, añadir que Dublín es una ciudad perfecta para aquellos que quieran salir de fiesta. De hecho, hace tiempo me topé con un vídeo que en 5 minutos ejemplifica exactamente lo que nosotros vivimos en Dublín en un mes.